{ENTREVISTAS}

'Ahora mismo, parece que la cultura es el enemigo'

Ariel Rot publica 'La Huesuda', su séptimo disco, jazz, swing y, por supuesto, rock and roll

Ariel Rot acaba de sacar disco, ‘La Huesuda’ se titula. Es su séptimo trabajo en solitario, tras sus míticos pasos por Tequila y Los Rodríguez. ‘La Huesuda’ suena realmente bien. Suena elegante con una pizca canalla –tiene que ser así, es rock and roll-; suena valiente y maduro. Suena a jazz, swing y, por supuesto, a rock and roll. Satisfecho y afortunado por haber podido elegir el estilo de vida con el que había soñado desde niño, asegura que siente adicción por salir de gira. “Qué gracia tiene todo esto –dice- si luego no vas a subirte a un escenario para tocarlo”. Meticuloso en el trabajo de componer, es él quien marca los tiempos, le gusta pulir las canciones hasta que encajan a su gusto. “No tengo ansiedad por acumular material”. Observa tiempos difíciles para la cultura y asegura que es “casi insensato lo que está sucediendo”. Mientras tanto prepara su inminente gira con Loquillo y Leiva, porque como dice uno de los temas de ‘La Huesuda’  nunca es tarde para el rock and roll./Javi Muro

SPOONFUL.- Lo primero enhorabuena. El disco suena muy bien. ¿Cómo definirías ‘La Huesuda’?

… Creo que es un disco muy sólido, un disco valiente. Un disco que ha salido por ese lado más sofisticado y más oculto.

S.- En ‘La Huesuda’ hay diferentes palos; estilos muy diversos, aunque siempre con el enlace del rock and roll. ¿Cuándo te surge una idea, una historia para una canción, imaginas ya el estilo que le va, te lo va pidiendo?

Lo cierto es que cuando tienes el título ya le da una atmósfera, pero también es muy divertido jugar a romper esto. Muchas veces trabajo con textos largos ya hechos y me gusta, de repente, ir buscando por otro lado hasta que finalmente encuentras lo que quieres. Es algo que cuesta, que lleva más tiempo, pero, por ejemplo, el tema ‘Los últimos cien metros’ pasó por un montón de músicas hasta que finalmente quedé satisfecho con el resultado. Pero creo que el disco suena totalmente homogéneo. No hay nada que me desentone, no hay nada que de repente no tenga sentido.

S.- … ese enlace con el rock …

Con la interpretación más que nada. Las músicos que suenan en el disco son todos músicos de rock, pero son también grandes músicos; músicos que pueden acercarse a cualquier género y adaptarlo a su manera de tocar.

S.- Tus canciones tienen cierto carácter de relato. Cuentan algo… ¿Las imaginas en conjunto como disco o son capítulos independientes?

Son totalmente independientes, pero sí, me siento bien cuando cuento una historia y se entiende y está bien contada estéticamente, musicalmente me refiero. Combinar estas dos cosas parece que es fácil pero no lo es. Es, digamos, una cierta marca de la casa desde ‘La milonga del marinero y el capitán’ hasta historias menos fantásticas y más reales que he compuesto, aunque en el disco creo que también hay cosas más metafísicas como ‘Los últimos cien metros’ o ‘Emociones escondidas’… hay ciertas novedades en mis canciones. Versos más abstractos, aunque detrás de cada frase hay algo.

S.- En tus canciones hay humor, ironía, melancolía y en ‘La Huesuda’ parece cobrar importancia también la idea de tiempo, ¿no?

Parece que sí –se ríe. Ahora todo el mundo me comenta el paso del tiempo. Yo no lo analizo. Mi conclusión es que entre mi percepción de lo humorístico y lo irónico y el paso del tiempo hay una relación muy clara, cuanto más pasa el tiempo más necesario es el humor.

S.- En cambio,  siguiendo con los tiempos, da la impresión de que eres tú quien los marca en tus trabajos, cuándo compones y cuándo editas…

Me gusta no estar presionado y poder mimar lo que estoy haciendo, poder trabajar de una forma meticulosa. Creo que en ese sentido cada uno tiene sus tiempos. No me gusta apretar el acelerador, no tengo ansiedad por tener material. Soy yo el que siente que un disco es necesario, pero a nivel de composición no soy ansioso. Ni para tener terminada una canción ni por acumular material.

S.- Eso te permite también pulir tus temas, dejarlos a tu gusto, ¿no?

Me divierte mucho pulir las canciones. No acabo de sentirme cómodo si hay alguna frase que no termina de estar a la altura. Es una gran actividad para ejercitar la cabeza, es como hacer crucigramas, de repente hay una frase que no termina de encajar e igual durante tres días estás dándole vueltas hasta que al final das con la idea adecuada.

S.- La escritura, las letras de las canciones, ¿entiendes que son más importantes ahora que al principio de tu carrera?

Creo que me quité mucha presión en ese sentido. Al revés, la letra era muy importante al principio, me daba mucho respeto y hasta me acojonaba, diría. Ahora, en cambio, sé que si tengo que hacer una letra la hago. No tengo ningún problema, simplemente encontrar algo que quiera contar y a partir de ahí ponerme a trabajar. Las letras salen. No siempre son tan importantes las letras, de hecho nos hemos tirado toda la vida escuchando música sin entender una palabra de lo que decían las canciones. Muchas veces la letra tiene que ser un vehículo para llegar a la canción. Hay quienes hacen grandes letras, ¿Con eso vale?... en todo caso apuesto por todo lo contrario, hacer grandes canciones. Estamos hablando de pop, de rock, no de literatura.

S.- Creo recordar que te he escuchado decir que reivindicas la libertad del rock y lo afortunado que te sientes de haber elegido el estilo de vida que soñaste de niño…

Indudablemente y si en algún momento tuviese la mala suerte de tener que vivir de otra cosa… espero que eso no ocurra en ningún momento a estas alturas, pero… La música no es sólo mi profesión, es lo que da sentido a todo lo que me ha pasado en la vida. Con quién me he relacionado, todo ha ocurrido alrededor de la música.

S.- Aún así, los tiempos actuales son duros; también en la música supongo. La cultura no parece una de las prioridades en la sociedad de hoy en día…

No, parece que la cultura es el enemigo ahora mismo, da esa impresión. Parece incomprensible que exista tanto ensañamiento, no se puede explicar. Es casi insensato lo que está pasando con la cultura. Pero esto es un compromiso de vida y sería injusto y hasta estúpido ponerse a hablar del negocio… para mí puede ser un buen año, no lo sé… ‘La Huesuda’ puede proveer alegría, cosas maravillosas donde todo está genial y a los músicos no les cabe el dinero en el bolsillo… bueno, creo que es todo muy aleatorio…

S.- Recuerdo un verso de una de tus canciones de ‘Sólo Rot’, que decía algo así como: “Me gustan los billetes como a todo el mundo, pero no ganarlos de cualquier manera”. Menuda premonición para estos tiempos…

Qué puedo decir sobre eso… He tenido ‘starbucks’, he tenido ofertas y las he rechazado porque no es sólo la imagen que pueda dar, es que yo en esas situaciones sufro y si puedo evitarlas las evito, porque tampoco me van a servir para retirarme ni para cambiar mi estilo de vida, simplemente es dinero. No sé… no soy muy derrochador, no soy ostentoso, si tuviese más dinero no creo que viviese de una manera muy diferente a la que vivo.
S.- Cambiando de tema, salir de gira tiene que ser una auténtica aventura, ¿recompensa y ya no digo económicamente, sino casi para el espíritu?

Absolutamente, que gracia tiene todo esto si luego no te vas a subir a un escenario a tocarlo, ¿no? Es una gran recompensa y, además, uno de los momentos más felices de esta profesión. Cuando un concierto sale bien, cuando disfrutas en el escenario, con la gente que estás tocando, con el público. Es como una ceremonia perfecta, en la que todo el mundo sale feliz.

S.- En ese sentido, ¿Has tenido la sensación alguna vez de estar viviendo el ‘concierto perfecto’? … música, ambiente, público…

Sí, ha habido algunas veces en que no quieres que se acabe y lo estiras. Si fuese al revés, uno empezaría a pensárselo…

S.- ¿Sientes adicción a tocar y a componer? ¿Hay momentos de parón o siempre hay algo borboteando en tu cabeza?

No, no. Hay momentos en que con la composición de canciones paro completamente. Entonces, cojo un instrumento y practico las canciones nuevas. Son momentos de interpretar mucho y preparar cosas. Necesito que mi creatividad pare para que vuelvan a surgir cosas. Con las giras sí que tengo cierta adicción. Llega un momento en que si pasa un determinado tiempo y no salgo de casa y viajo empiezo a sentirme un poco enjaulado.

S.- No sé si has visto el documental ‘Searching for Sugar Man’. Parece increíble descubrir aún hoy a alguien que hacía una música maravillosa y que había pasado absolutamente inadvertido. ¿Sigues descubriendo buena música, sea de ayer o de hoy?

Sí, he visto ‘Searching for Sugar Man’ y sí escucho mucha música. De hoy hacia atrás es casi inabarcable la buena música que hay, desde que se empezaron a grabar discos hasta ahora. De un país a otro, siempre vas a encontrar algo. Ahora, por ejemplo, estoy escuchando mucha música italiana; alguna cosa de los años cincuenta, también a Paolo Conte. Y También sigo escuchando blues, soul y siempre encuentras algo nuevo que te sorprende.

S.- Estás preparando la gira con Loquillo y con Leiva, ¿Se puede proponer algo más rock and roll?

Bueno, hay quien opina que somos unos moñas (se ríe). El rock es muy amplio y creo que nosotros estamos en un extremo, seguro que a grupos hardcore y punk lo nuestro les parecerá muy naif.

S.- De alguna manera, una de las canciones de ‘La Huesuda’ se titula ‘Nunca es tarde para el rock and roll’ y parece toda una reivindicación…

Sí, es como una radiografía muy concreta del momento que estoy atravesando. Es una canción donde en todo lo que digo prácticamente no hay ficción. Lo que aglutinaba todo lo que estaba diciendo era precisamente eso, que nunca era tarde para el rock and roll.

S.- El rock and roll surgió rompiendo esquemas e igual estamos en un momento en que algunos esquemas también tienen que ser cambiados, modificados…

Sí, pero lo que ocurre es que el rock and roll es un lenguaje que cada uno tiene que utilizar para realmente expresar su obra honesta. Yo no puedo ponerme a hablar sobre que no encuentro trabajo, sobre ser joven, sobre el chaval que está en la calle, sobre que la Policía te persigue y todo lo que conlleva esa situación, todas esas letras que ya escribí con Tequila en aquel momento. Cada uno tiene una edad y lo peor es pretender ocupar otro lugar. Es lo más torpe y lo más patético. Pero creo que sí, espero que sí, que haya una resistencia y que el rock sirva como vehículo para expresar los dolores de los jóvenes en estos momentos.

S.- Hablábamos de la gira con Loquillo y Leiva, ¿Qué importancia le concedes a colaborar con otros artistas, con otros grupos? ¿Qué te aportan y qué crees que les aportas?

Bueno, depende. Hay veces que existe una relación de amistad e incluso antes de escuchar el material ya digo que sí, y otras, en las que el motivo es que me apetece participar en cosas que no he hecho todavía. Ahora, he estado colaborando con un amigo que vive en Francia y está realizando un proyecto de música tango y me llamó para que haga las guitarras. Hay distintos tipos de colaboraciones, hay algunas que son más de ir de fiesta al estudio y otras que requieren más atención y preparación, que son más complejas. Todo suma y todo es divertido.

S.- ¿Habrá gira con ‘La Huesuda’?

Bueno… gira hoy en día son palabras mayores, habrá conciertos. Estamos haciendo algunas cosas, tocando un poco, tratando de que la banda comience a tener alegría y que empiece a rodar, pero las presentaciones oficiales serán en octubre.

 

S.- ¿Del disco ‘La Huesuda’ hay alguna canción a la que tengas especial cariño?

No sabría decirte, creo que eso también lo dan muchas veces los directos. Canciones que las tenías dormidas, las tocas en directo y cobran otro sentido y se posicionan de otra manera en el repertorio. Curiosamente, son canciones que están más cerca del estilo de ‘La Huesuda’ que de ‘Sólo Rot’, más medios tiempos…

S.- … apetece escuchar en directo ‘Rubias de Nueva York’…

Bueno, bueno. Por supuesto, sí, sí, sí. ‘Rubias de Nueva York’ es muy agradecida para tocar, complicada también, pero una vez que la pillas da mucha alegría tocarla.

S.- Recuperas de tu primer disco en solitario el tema ‘Debajo del puente’…

Es la revancha de ‘Debajo del puente’, un tema que siempre me quedé con ganas de haberlo hecho mejor. Volví a tocarla en directo y poco a poco fue ganando posiciones hasta ser, en el orden, la primera de ‘La Huesuda’. Ahora tiene un ‘toque’ muy especial, con las guitarras y la percusión conseguimos algo nuevo. Realizamos un trabajo de exploración importante hasta que encontramos lo que queríamos. Este trabajo nos hizo reflexionar mucho y a partir de esta canción el disco se convirtió en otra cosa en general.

S.- Y para terminar… ¿Quién es La Huesuda?

La Huesuda es la muerte; pero es una muerte bonita, simpática y seductora. De todas las muertes posibles, sin duda, la mejor. Sería morir en brazos de una mujer.

 

Fotografías: Alfredo Tobía.

Autor: Javier Muro