{ENTREVISTAS}

'Nosotros ya teníamos ganas de pasarlo bien, pero Paco León sabía tocar las teclas'

Álex García y Natalia de Molina comparten filias en su nueva película

Natalia y Álex son jóvenes, guapos y modernos. Se quieren, pero ella oculta unos extraños gustos sexuales, heredados y compartidos con varios miembros de su familia. Tras experimentar la dendrofilia, el nuevo calentón que le sube a ella es la harpaxofilia. Y él, visiblemente celoso, hará lo que sea para ser quien la satisfaga... Pero todo eso en la ficción, al ser dos de los protagonistas que tiene a bien dirigir Paco León en 'Kiki, el amor se hace' (2016).

"En promociones de otras películas más profundas, la gente ya resopla antes de empezar a hablar. Parece que les da pereza por ese suspiro. Y aquí, sin embargo, llegáis todos con brillo en los ojos y se crea una situación muy positiva", comenta el actor canario Álex García. "La promoción está siendo una gozada porque esta película es muy jugosa", añade la actriz Natalia de Molina, cuyo acento andaluz se intercala con el de su compañero de rodaje.

Ella, que a sus 26 años ya ha ganado dos premios Goya (mejor actriz revelación en 2014 y mejor actriz protagonista en 2016), no muestra tapujos cuando la conversación sube de tono. "Es muy fácil hablar de esta película y entrar a debate sobre las filias, sobre el sexo, etc. Es una muy, muy buena comedia; muy inteligente, muy ácida y con momentos magistrales", destaca una Natalia que salta con facilidad del género humorístico al género lacrimógeno.
No en vano, el dramático film 'Techo y comida' le supuso a principios de año un alud de trofeos y felicitaciones. "Yo aquí no iba con ese chip. Era otro proyecto, algo nuevo y me apetecía muchísimo cambiar para hacer algo que no había hecho. Sí que ya había hecho comedia, pero no así", confiesa. "El chip cambia en el momento en el que ya terminas de hacer una película y te pones con otra, pues ya entras en la nueva y no te quedas atrapada", agrega.

Sentado a su lado durante la entrevista, Álex refuerza el argumento de su compañera mientras describe el estilo de Paco León. "Es el creador de todo esto. Y el director influye mucho aunque debe tener material. Nosotros ya teníamos ganas especiales de hacer comedia y pasárnoslo bien, pero Paco sabía tocar las teclas", destaca. "Sabía ponernos en situaciones en las que, sin nosotros saberlo, la propia situación tenía comedia", insiste el tinerfeño.

"La primera escena de cama... simplemente ocurrió. Fue muy Paco León. Él hace que vaya ocurriendo sin que te des cuenta; nosotros no sabíamos que íbamos a rodar lo que luego ha salido", admite el actor. "Al principio, de vez en cuando Paco decía 'ah, me gusta eso. Vamos a hacer unos planitos aquí y unas cositas acá...'. Y buf, unas cositas, unas cositas... acabamos que no veas", se ríe Álex sobre el inicio con él y Natalia llegando al clímax sexual.
"Si había rubor, se fue en el segundo uno. Porque se creó un ambiente muy poco usual para rodar una escena de sexo; muchas veces son algo muy técnico y aquí en cambio fue casi de jugar", puntualiza la actriz a la vez que Álex da detalles: "Nosotros no lo habíamos hecho con noción de comedia. Pero la situación ya es tan fuera de lugar, la cámara a ver dónde está colocada y todo lo que rodea eso... que se genera una comedia que tiene más que ver
con Paco que con nosotros".

Y apreciar esa categoría de chistes es la eterna batalla. "A nivel internacional, a la crítica le cuesta mucho valorar la comedia. Los americanos tienen grandísimos cómicos que nunca verás nominados a los Óscar. Adam Sandler, Ben Stiller y toda esta tropa son buenísimos; es muy difícil hacer lo que hacen, porque casi hacen drama", apunta Álex. "Pero la crítica siempre ha ninguneado a la comedia y es la gran lucha que siempre habrá", se lamenta.

"Sin embargo, en España poco a poco van entrando y se olvida el resquemor", reconoce el canario. "El año pasado en los Goya estaba 'Requisitos para ser una persona normal' y, hace dos, estuvo 'Tres bodas de más'. Lo más importante es que, cuando hay una buena comedia, el soberano público no falla y suele ir a verla. Una comedia se convirtió en la peli más taquillera en la historia de España, lo cual es muy buena señal", concluye acerca de 'Ocho apellidos vascos'./Daniel Cabornero